La ministra de Ciencia y líder del PSPV, Diana Morant, ha augurado que el acuerdo entre el PSC y ERC sobre una financiación singular para Catalunya será «bueno para el resto de España», al tiempo que ha afirmado que el Gobierno tiene que «reconocer la singularidad de todos los territorios en ese nuevo modelo de financiación» autonómica.
«Catalunya va a seguir aportando para la financiación del resto de territorios de España. Por tanto, yo creo que es un buen acuerdo para Cataluña, pero también es un buen acuerdo para el resto de España», ha manifestado a preguntas de los periodistas en Elche (Alicante) sobre el pacto entre socialistas y republicanos para la investidura de Salvador Illa como 'president' de la Generalitat catalana.
Preguntada por si le preocupa el término de financiación singular para Catalunya, Morant ha señalado que es lo que establece «el acuerdo de gobierno» y ha añadido: «Yo creo que a día de hoy tenemos que reconocer la singularidad de todos los territorios en ese nuevo modelo de financiación».
Respecto al pacto PSC-ERC, ha indicado que, por lo que ha leído, se trata de «una mejora de la financiación de los servicios públicos en Catalunya» y de «garantizar la solidaridad con el resto de territorios».
Frente a ello ha criticado las «hipérboles» del 'president' de la Generalitat Valenciana, el 'popular' Carlos Mazón, en materia de financiación y le ha instado a que «aclare» qué modelo propone él para la Comunitat Valenciana porque, según ella, los ciudadanos «todavía» lo desconocen.
En esta línea, ha vuelto a denunciar la bajada de impuestos de Mazón «a los más ricos», que ha relacionado con una recaudación de «prácticamente mil millones menos» para los servicios públicos, y ha mostrado «muy pocas esperanzas» de que el modelo de financiación que propone el jefe del Consell sea «beneficioso para el conjunto de los ciudadanos y que sea progresivo y que no regresivo, que es lo que ya está haciendo aquí Mazón o lo que hace el PP allá donde gobierna».
Además, Morant ha acusado a los diputados del PP en el Congreso de «disminuir la capacidad de gasto de la Comunitat Valenciana», tanto del Consell como de los ayuntamientos.