Arranca en Les Corts el debate de las cinco proposiciones de ley que han presentado el PP y Vox (Libertad Educativa, la de À Punt, Transparencia, Concordia y Antifraude) entre celebraciones de estos dos grupos, cuyos síndics han señalado que es un día «muy importante» y «extraordinariamente feliz», frente a la oposición que ha calificado este miércoles como «un día negro» y «de la infamia».
El síndic del PP, Miguel Barrachina, ha defendido que hoy es un día «enormemente feliz» porque se da cumplimiento a uno de sus «compromisos electorales» como es que «sean los padres y no los políticos» quienes elijan «la lengua en la que estudian» los hijos.
También ha criticado las amenazas de recurso de la oposición a estas proposiciones, y les ha instado a «enmendar» las propuestas, aunque ha considerado que PSPV y Compromís están «habituados» a que se planteen las propuestas por decreto ley como ha denunciado que hace el Gobierno.
Por parte de Vox, José María Llanos ha defendido que este es un «día importante para los valencianos» porque estas leyes pretenden «eliminar todo sesgo partidista a la legislación en la Comunitat Valenciana».
Llanos ha defendido que este gobierno «piensa» en los valencianos y que no busca «hacer colectivos apesebrados». De hecho, ha considerado que estas leyes suponen un «reformismo puro y duro» y ha señalado que el hecho de que el Botànic lo considere una «involución» es «lo más progresista».
Por parte del PSPV-PSOE, José Muñoz, ha señalado que este es un «día de la infamia» puesto que el PP ha impulsado «cinco propuestas de involución democrática» y ha hecho hincapié en la «ley del blanqueamiento del franquismo», que a su juicio es la «más antidemocrática de España».
Muñoz ha señalado que van a «recurrir ante quien sea y como sea» ya que «vulneran principios universales». «No nos va a parar nadie», ha remarcado, y ha situado al PSPV-PSOE como la «alternativa a la involución democrática».
Por último, el síndic de Compromís, Joan Baldoví, ha defendido que hoy es un «día negro para la democracia valenciana» y para las libertades de los valencianos ya que, a su juicio, se están poniendo las bases de «volver al pasado» que se está «juzgando en el Palau de la Justicia».
«Que no hablen de concordia. Eso sería el día que no quedara ni una sola víctima enterrada en las cunetas, ese será el día que tenemos concordia», ha agregado. «Es una ley con tan poca calidad jurídica que llamarla de concordia es un insulto para las personas que han defendido la libertad y la concordia».