La Guardia Civil, en el marco de la operación denominada 'Camigun', ha dado por desarticulada una presunta organización criminal dedicada al tráfico de armas y drogas en las provincias de Córdoba y Sevilla tras practicar once detenciones de personas acusadas de supuestos delitos de tenencia ilícita de armas, depósito de armas de guerra, contra la salud pública, pertenencia a organización criminal, blanqueo de capitales y defraudación de fluido eléctrico.
Según ha informado este jueves el instituto armado en una nota, la operación arrancó el pasado mes de abril del 2023, cuando se produjo un tiroteo en una barriada del municipio cordobés de Puente Genil.
Fue entonces cuando los investigadores comenzaron a sospechar de que una organización criminal podría haberse asentado en la provincia de Córdoba, según ha detallado la Benemérita, desde donde han explicado que el desarrollo de las pesquisas permitió identificar a los presuntos integrantes de la organización y comprobar que todos ellos contaban con antecedentes policiales por venta de armas a otras organizaciones criminales dedicadas al narcotráfico en el sur de España.
En total, se han realizado 15 entradas y registros simultáneos en las localidades de Puente Genil (Córdoba) y Aguadulce (Sevilla), y se ha procedido a la detención de los once presuntos integrantes de la organización.
Además, se ha intervenido en el marco de esta operación un fusil AK-47, cinco armas cortas (pistolas), junto a cargadores de alta capacidad, seis armas largas, un bolígrafo-pistola y abundante cartuchería metálica y no métálica.
Asimismo, se han incautado 1,2 kilogramos de cocaína, 1,54 kilogramos de hachís, 900 gramos de MDMA, 100 gramos de heroína, dos recipientes contenedores del llamado 'gas de la risa' --óxido de nitrógeno--, numerosas armas blancas y 106.000 euros en metálico.
También se han desmantelado dos plantaciones de marihuana, según ha precisado la Guardia Civil, que ha detallado que las armas cortas intervenidas tienen los números de serie «borrados para dificultar su trazabilidad», y entre ellas destaca por su «especial peligrosidad» una pistola de nueve milímetros modificada para hacer fuego automático y con una cadencia de tiro de 1.200 disparos por minuto, y que tiene la categoría de arma de guerra.
La operación ha sido llevada a cabo por agentes pertenecientes al Servicio de Información de la Guardia Civil, el Área de Investigación del Puesto Principal de Puente Genil, la Unidad Especial de Intervención, el Grupo de Acción Rápida, el Grupo de Reserva y Seguridad número 2, la Usecic de Córdoba y de Sevilla, el Servicio Cinológico y el Servicio Aéreo.