El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha asegurado este domingo que «si no tenemos una primavera lluviosa, si no lloviera de aquí al verano, tendríamos serios problemas de abastecimiento en capitales de provincia y en municipios importantes, con el impacto para la población, pero también económico en la agricultura, la industria y el turismo».
En una entrevista con el diario Sur, recogida por Europa Press, Moreno invita a «asumir que la sequía se ha convertido en un problema estructural» y por esa razón esgrime el trabajo del Gobierno andaluz en ese sentido por cuanto «desgraciadamente, en Andalucía va a faltar agua», por lo que defiende que «hemos activado más de mil actuaciones en materia de agua que van a suponer una inversión superior a los 4.000 millones de euros aquí a 2027».
«Por eso apelo a la necesidad de un gran Pacto por el Agua, y de crear una alianza entre administraciones para poner en marcha cuanto antes estas actuaciones», prosigue explicando en la entrevista el presidente del Gobierno andaluz, quien remarca que «es un problema que no afecta solo a Andalucía», para apuntar seguidamente que «hay dos comunidades que lo estamos pasando mal, que son Cataluña y Andalucía».
Se lamenta de que «el clima político de mucho ruido y confrontación no acompaña», así como reconoce que «veo muy difícil que una comunidad coopere con otra en materia de agua» para lo que esgrime como fundamento que «no es la prioridad que tiene el Gobierno de Sánchez en este momento y porque no veo a un independentista haciendo solidaridad en materia de agua».
Cuando se le pregunta por las actuaciones más urgentes, el presidente andaluz advierte con un «si fuera necesario» sobre la posibilidad de «disponer de barcos cisternas para abastecer el litoral de la Costa del Sol desde el puerto de Málaga», a lo que suma otras herramientas como desaladoras y desalobradoras portátiles, además de recuperar los sondeos estratégicos «para dar servicio a corto plazo a zonas tan afectadas como la Axarquía».
Tras precisar el trabajo que se hace «para hacer realidad cuanto antes la desaladora de Vélez Málaga», junto con actuaciones similares en Málaga y Marbella, reclama del Gobierno «que entienda también la urgente necesidad de poner en marcha instalaciones de este tipo, que tardan entre tres y cinco años».
Entre las referencias que hace el presidente andaluz a su reciente estancia en la Cumbre del Clima de Naciones Unidas, COP28, celebrada en Dubai (Emiratos Árabes Unidos), el presidente andaluz apunta que «una de las cosas que hemos hecho en Dubái es ir a aprender de países que son más secos que Andalucía y donde se han puesto en marcha soluciones para solventar la falta de agua estructural con grandes infraestructuras que han supuesto el fin definitivo de este problema para la población y para abastecer sus necesidades hídricas».