Andalucía afronta un verano más caluroso de lo normal y probablemente será más lluvioso de lo habitual, con una probabilidad mayor en las comarcas orientales andaluzas, tras una primavera «extremadamente cálida», según la predicción de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
Así, la Aemet precisa en un comunicado que los pronósticos de temperatura para el verano en Andalucía son diferentes para las
comarcas occidentales y las orientales, «con un 50%» en el primer caso de que este periodo «sea más cálido de lo normal», un probabilidad que «se acentúa en las comarcas más orientales andaluzas, donde sube al 60%».
En cuanto a la precipitación, apunta a una probabilidad «del 40%» de que sea más húmedo de lo normal, «no descartándose con una probabilidad del 25% que sea por el contrario más seco». No obstante, añade que en las comarcas orientales andaluzas, los pronósticos indican una distribución de probabilidad algo diferente, «con un 50% de probabilidad de que el verano sea más húmedo de lo normal y de un 20% de que sea más seco».
Por su parte, en cuanto al comportamiento térmico de la primavera --marzo, abril y mayo-- en Andalucía, desde la Aemet precisan que «ha sido la más cálida desde 1961», con una temperatura media de 17,1 grados, lo que supone una anomalía de 2,1 grados respecto al periodo de referencia 1991-2020, considerándose como
«extremadamente cálida», siendo la primavera de 2015 la segunda en este ranking, con una anomalía de 1,5 grados centígrados. En el lado opuesto se sitúa la de 1971, que es la más fría de todas con una temperatura media de 11,6 grados y una anomalía de -3.2 grados.
Además, la Aemet indica que este primer lugar en el ranking se mantiene también para la temperatura máxima de la primavera con una temperatura media de las máximas de 24,0 grados, correspondiente a una anomalía de +3.0 grados y un carácter de «extremadamente cálida». Mientras, en el caso de las temperaturas mínimas, ocupa el segundo lugar de su ranking con una media de 10,4 grados, correspondiente a una anomalía de +1.5 grados, caracterizada por tanto como «muy cálida».
Por meses, tomando como inicio del periodo de estudio 1961, marzo, con una temperatura media de 14,3 grados y una anomalía de +1,9 grados, ha sido el segundo más cálido, y abril ha sido el más cálido con una temperaturas media de 18,3 grados y una anomalía de +3.9 grados, considerado por tanto como «extremadamente cálido». Finalmente, mayo puede considerarse térmicamente como un
mes normal ocupando el 20º lugar en el ranking de los más cálidos.
Por provincias, la primavera se considera en todas como «extremadamente cálida», con anomalías que se mueven en el rango de +1.5 grados en el caso de Almería y +2.5 grados tanto en Jaén como Málaga.
Durante la primavera de 2023, la Aemet ha distinguido también tres episodios destacados. El primero va desde el 1 al 6 de marzo, pero realmente es continuidad de un episodio que se inicia el 23 de
febrero y se corresponde con la presencia del Anticiclón Atlántico sobre la Península orientado su eje mayor en la dirección suroeste-nordeste, lo que hace traer una masa fría y seca de origen escandinavo.
68 días consecutivos de temperatura por encima de la media
El segundo, continúa, se inicia el 7 de marzo y se extiende hasta el 12 de mayo y se corresponde con una situación anticiclónica permanente sin apenas precipitaciones, y que ocasiona que durante 68 días consecutivos, la temperatura media en Andalucía está por encima de la media diaria en el periodo de referencia 1991-2020, «un hecho insólito desde 1961».
Hay un tercer episodio que se inicia el 13 de mayo y continúa en los primeros días de junio y se corresponde con la situación del Anticiclón Atlántico en las latitud de las islas británicas bloqueando el paso de borrachas pero permitiendo la ondulación de la circulación polar, lo que ocasiona la entrada de una masa de aire
frío en la mitad superior de la troposfera (entre 5.000 y 12.000 metros), que junto con el aire calentado de la superficie, sobre todo en las horas centrales del día, crea una nueva situación con nubosidad de evolución diurna, que traerá chubascos con tormentas y en ocasiones con granizo y que hará bajar las temperaturas.
Primavera "muy seca"
En cuanto a las precipitaciones registradas en el periodo de marzo a mayo, la primavera meteorológica de 2023 ocupa en quinto lugar
dentro de las consideradas como secas con una precipitación de tan solo 78,5 milímetros (mm), lo que suponen la mitad del la media de los 158 mm del periodo de referencia 1991 a 2020, lo que le atribuye un carácter de «muy seca».
Asimismo, la Aemet señala que en el registro por meses, los resultados son parecido para marzo y abril, destacando abril con tan solo 2,5 mm registrados, lo que supone el 4%, cuando la media del mes es de 56,3 mm, lo que le confiere un carácter pluviométrico de un mes «extremadamente seco».
Por el contrario, apunta que mayo ha sido un mes diferente a lo
que venía siendo habitual en este año agrícola, con la excepción de diciembre, de modo que ocupa el decimocuarto lugar dentro de los mayo más húmedo. Durante el mes de mayo se han recogido 61,6 mm de lluvia, lo que supone el 156% de la media, y es caracterizado como un mayo húmedo.
La Agencia concluye que las precipitaciones acumuladas en Andalucía desde el 1 de septiembre de 2022 hasta el 31 de mayo de
2023 es de 321,9 mm, siendo 543,1 mm la precipitación media de estos nueve meses para el periodo de referencia 1991-2020, lo que «supone un déficit acumulado de 221,2 mm». La mayor parte de estas
precipitaciones se corresponden con los episodios de lluvia de diciembre y este reciente de mayo.