La Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) contempla que el 50 por ciento de la cuenca entre en situación de «emergencia» en las próximas semanas si continúa la sequía, «una de las más graves» de todas las series históricas.
«Hemos iniciado la campaña con un déficit considerable y, si añadimos que no ha llovido, que lo que nevó se ha evaporado y que la primavera ha sido de las más secas de las series históricas, tenemos una sequía importante», ha alertado la presidenta de la Confederación, Dolores Pascual, antes de presidir una reunión de la Comisión Permanente de la Sequía, de la que también forman parte representantes de las nueve comunidades autónomas de la cuenca y usuarios.
«Es difícil decirlo», ha señalado Pascual en rueda de prensa, subrayando que «hay una percepción social de estos eventos» según la cuál «es la sequía más grave o de las más graves», tras lo que ha recordado que la sequía comenzó en 2022 y se hicieron prorrateos para regular el uso del agua, de forma que «ya hubo restricciones», aunque los regantes pudieron terminar la campaña gracias a las reservas de los embalses.
La situación de la cuenca del Ebro «ha empeorado» desde que se reunió la Junta de Gobierno de la CHE el 26 de abril, cuando este órgano acordó poner en marcha la Comisión Permanente de la Sequía. «Ha habido algunas lluvias en el norte de Navarra que no modifican sustancialmente la situación global», ha explicado Pascual.
La previsión elaborada el 15 de mayo contempla «un empeoramiento de la situación», de manera que a final de este mes de mayo pueden entrar en situación de «emergencia» --además del Segre, que ya lo está-- otras unidades territoriales que ahora están en «alerta», como el sistema Gállego-Cinca y el Huerva.
Respecto al Gállego y el Cinca, ha enfatizado que los regantes iniciaron la campaña con prorrateos importantes «y no se prevén empeoramietos de restricciones para el regadío» porque «cuentan con reservas para acabar la campaña mal, pero acabarla».
A fecha de hoy, 18 de mayo, el 65 por ciento de la cuenca del Ebro está en «sequía prolongada» y un 30 por ciento en «emergencia» desde el punto de vista de «la escasez de reservas» y, si a final de mes se confirma que se agrava la situación de las unidades territoriales mencionadas, entrará en emergencia el 50 por ciento de la cuenca. Además, «se prevé que a lo largo del verano haya menos aportaciones y la cosa vaya empeorando», ha aseverado Dolores Pascual.
Ha recordado que todos los grandes sistemas de riego de la margen izquierda iniciaron la campaña con prorrateos, de ahí que la CHE declarara la «situación excepcional por sequía extraordinaria» primero del Segre, donde la situación es «más preocupante», y después en el Bajo Ebro, las cuencas del Aragón y el Arba, también el Iregua, lo que se anunció el 26 de abril.
Medidas
En cuanto a las medidas, ha comentado que el Real Decreto del 11 de mayo prevé una serie de ayudas directas del Ministerio de Agricultura y, por parte de la CHE, la condonación de cánones y tarifas para los sistemas que tengan una reducción de las aportaciones y aportaciones de emergencia en los sistemas del embalse del Ebro, en Cantabria, y en Yesa, que abastece a la ciudad de Zaragoza. Además, se han aplicado caudales por sequía prolongada y se han adaptado los caudales ecológicos a la situación de sequía.
«Conforme vaya empeorando la situación, habrá que adoptar mayores restricciones, especialmente en el regadío», ha continuado Pascual, quien ha apuntado que está previsto que se reúnan las Comisiones de Desembalse con todos los usuarios, no solo los de regadío, en las cuencas en las que está declarada la «situación excepcional por sequía extraordinaria».
Se intensificará el control de aforos para caudales ecológicos, el control de vertidos, la definición de los concesionarios a los que se podrá dirigir la CHE para la adopción de medidas y se podrán habilitar autorizaciones provisionales «en caso de necesidades puntuales de agua para situaciones de crisis».
Además, la Confederación adquirirá medidores de caudales, se coordinará con otras Administraciones, como la Agencia Catalana del Agua, que tiene la competencia del dominio público hidráulico, y «a lo mejor» con el SEPRONA. Se establecerá un plan de seguimiento de los caudales ecológicos y de vigilancia ambiental en el Delta del Ebro.
La CHE está «en permanente contacto» con las diputaciones provinciales y promoverá «una senda de contención de aquellos usos que no sean prioritarios», ha manifestado Pascual.
Dolores Pascual ha sido clara: «No estamos hablando de abastecimiento, sino de aprovechamientos hidroeléctricos o de usos industriales; no estamos hablando de agua de boca», sino que se pretende trasladar a la población que «la situación de sequía se presenta larga y a lo mejor son prescindibles determinados usos».
Cataluña
En relación a la situación en las cuencas de Cataluña, el abastecimiento está garantizado «en un porcentaje elevadísimo por las obras de regulación» y se prevén «medidas de emergencia», mientras que en otras cuencas está previsto acometer «acciones a medio plazo, pero no para la sequía actual».
Las diputaciones de Huesca y Lleida han pedido una reunión con la CHE para evaluar su situación. «Se trata de una labor de concienciación colectiva», ha dicho Pascual, insistiendo en que «nadie se va a quedar sin beber», pero la sociedad debe ver que «de vez en cuando las sequías son fenómenos extremos; las inundaciones son muchísimo más impactantes, pero la sequía es progresiva, lenta, y se trata de tomar conciencia».
Ha solicitado a los ayuntamientos «que tengan en cuenta el origen del abastecimiento», recordando que pueden pedir ayuda a otras Administraciones, mientras que «hay muchas mancomunidades y consorcios que pueden contar con más medios».
Manifestación
Respecto a la manifestación de la Unió de Pagesos a las puertas de la CHE, en Zaragoza, esta semana, Pascual ha comentado que conversó con los representantes de este sindicato, que le manifestaron su «preocupación» y la necesidad de dar ayudas directas a los agricultores afectados por la sequía, señalando Pascual al respecto que la CHE «ni tiene competencias ni puede entrar».
Pascual ha expresado su respeto a los manifestantes y ha indicado que los representantes le pidieron mejoras en el Plan Especial de la Sequía y la CHE les animó a aportar las medidas que consideren pertinentes, recalcando que «la CHE está abierta a escuchar» y que la Unió de Pagesos es el sindicato mayoritario.