El consejero de la Presidencia, Interior, Diálogo Social y Simplificación Administrativa de la Junta de Andalucía, Antonio Sanz (PP), ha acusado este martes al Gobierno central de «dejación de funciones y responsabilidades» en relación a sus actuaciones para paliar las consecuencias de la sequía que sufre esta comunidad autónoma, y al respecto ha lamentado que el Ejecutivo de Pedro Sánchez «no está» y, «lo que es peor, no se le espera» en esta materia.
Así lo ha trasladado el consejero de la Presidencia en la rueda de prensa posterior a la habitual reunión semanal del Consejo de Gobierno, en la que ha vuelto a reclamar al Ejecutivo central que acometa las obras hidráulicas que tiene pendientes de llevar a cabo en Andalucía y que son de su competencia, según ha remachado.
Antonio Sanz ha apuntado que la Junta reclama estas obras «no para confrontar, sino por necesidad», y ha enumerado algunas de ellas, como el trasvase de la demarcación del Tinto, Odiel y Piedras a la del Guadalquivir; la presa de Alcolea, «imprescindible en la provincia de Huelva»; así como que «duplique la capacidad de la desaladora de Carboneras», en Almería; la conexión del Campo de Tabernas con la Venta del Pobre, también en la provincia almeriense; la ampliación de la desaladora de Marbella y Mijas y la construcción de una nueva desaladora para la Axarquía de Málaga; las conducciones de las presas de Rules (Granada) y Siles (Jaén); la presa de Gibralmedina y sus conducciones en Cádiz, o la conexión del Puente Nuevo con Sierra Boyera en la comarca cordobesa de Los Pedroches, y la presa de San Calixto en Córdoba.
El consejero ha apuntado que «parece cada día más claro que al Gobierno de Sánchez no le interesa que Andalucía crezca y le vaya bien», y ha remarcado que del Estado depende el 67% del territorio andaluz en materia hidráulica, a través de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, pese a lo cual, según ha criticado, solo ha aprobado un decreto de sequía dotado con nueve millones de euros, mientras que la Junta, que solo gestiona el 33% del territorio andaluz en lo que respecta a las obras hidrológicas, ha aprobado ya tres decretos de sequía que suman un montante global aproximado de 300 millones de euros, además de «un plan de soluciones y obras para la sequía con una inversión prevista que supera los 4.000 millones de euros», según ha puesto de relieve.
"descaro" del gobierno
Preguntado por unas declaraciones del ministro de Agricultura, Luis Planas, este pasado fin de semana en Andalucía en las que pedía más implicación a la Junta en materia de sus competencias frente a la sequía, Antonio Sanz ha sostenido que «venir a Andalucía a criticar sólo al Gobierno de la Junta sin responder de sus obras que tendría que haber ejecutado hace décadas», de las que «no ha hecho absolutamente nada», y «solamente ha sacado un decreto con nueve millones de euros, es echarle mucho descaro a la política».
Por ello, Sanz ha instado al Gobierno a «cumplir» con sus obras hidráulicas pendientes en Andalucía «antes de pedir explicaciones a la Junta» sobre lo que está haciendo la administración autonómica.
El consejero de la Presidencia ha subrayado además que «el agua es un motor económico, y sin ella no hay actividad económica posible», y ha advertido de que «no se va a poder aguantar mucho tiempo más a pérdidas por parte de determinados sectores».
Ha insistido en defender que «desde el Gobierno andaluz ponemos todas las medidas posibles dentro de nuestro margen de actuación posible, que es del 33% del territorio en el ámbito de las obras hidráulicas», según ha insistido, pero «solos no lo podemos hacer, sobre todo teniendo en cuenta el margen de actuación del Gobierno central», al que, por ello, Antonio Sanz ha insistido en reclamarle «compromiso» y que adopte una «verdadera política de Estado» en materia de sequía. «Lamentablemente, echamos de menos esa reacción por parte del Gobierno», ha concluido el titular andaluz de la Presidencia.