La presidenta de la Comunidad, Isabel Díaz Ayuso, ha defendido este viernes en el 40º aniversario del Estatuto de Autonomía que Madrid es una región que «no eleva muros» sino que «los derriba» así como que es «una España dentro de otra».
La Real Casa de Correos, sede del Gobierno regional, ha acogido esta cita, en la que también han participado el expresidente de la Comunidad Joaquín Leguina y el exalcalde de la capital Juan Barranco.
La dirigente regional ha incidido en que Madrid «no accedió a la autonomía apelando a una pretendida identidad» sino que aprobó su Estatuto «cuando ya se habían constituido prácticamente» todas las regiones, sin un "particular arraigo histórico ni popular.
Ayuso ha defendido que la Comunidad defiende a los madrileños pero también al conjunto de la nación«. »Cada uno de los presidentes de la Comunidad de Madrid hemos sido leales y orgullosos representantes del Estado, sintiéndose concernidos por lo que ocurre en cualquier otra parte del territorio nacional", ha subrayado.
Para la presidenta regional, «el Estado Autonómico es la fórmula que mejor se ajusta a la realidad territorial» del país, una antigua nación «con unas fronteras que apenas han variado en los últimos cinco siglos». «Somos, como dice la Constitución, una patria común e indivisible y eso no significa, afortunadamente, que seamos un país uniforme. Ni lo es ni queremos que lo sea», ha apuntado.
Región "abierta e integradora"
La jefa del Ejecutivo madrileño ha incidido en que Madrid «es consciente de la diversidad de España» por muchas razones pero, sobre todo, porque «es el fruto de esa diversidad». Así, ha hecho hincapié en que es «el rompeolas de las Españas, una España dentro de otra» y que está hecha de «de asturianos, catalanes, andaluces o vascos».
«Somos una región abierta e integradora que está hecha de las diferentes formas de ser español. Aquí no hay forasteros. No hay maketos. No hay charnegos. Hay madrileños de Cádiz, de Bilbao o de Caracas», ha remarcado, al tiempo que ha hecho hincapié en que la Comunidad «no se lanzó desesperadamente en busca de peculiaridades» que les diferenciarán «de otras regiones para fabricar un hecho identitario».
Ayuso ha hecho hincapié en que Madrid es consciente de que forma parte «de un todo», por lo que siempre han ejercido su autonomía «con lealtad» y no han dedicado «un solo euro al negocio de la identidad». «En Madrid hemos preferimos crear prosperidad en vez de crear una nación. Y hoy seguimos huyendo del localismo. No queremos replegarnos sobre nosotros mismos. Aquí importa dónde vamos, no de dónde venimos», ha declarado a continuación.
La presidenta de la Comunidad ha sacado pecho de que esas competencias competencias autonómicas son las que han permitido a la región «bajar los impuestos, hacer grandes reformas, fomentar la competencia, suprimir burocracia o garantizar la libertad educativa frente a modelos de adoctrinamiento».
«Llevamos cuatro décadas poniendo la autonomía al servicio de la libertad de las personas. Los madrileños llevamos años escogiendo en libertad médico, hospital o colegio, y disfrutando de la libertad de horarios comerciales, conquistas de los madrileños que hoy son derechos», ha puesto en valor.