El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha recordado este sábado el legado «imborrable» que deja el papa Benedicto XVI no solo en el «ámbito de la Iglesia», sino también «en general con su labor en todo el mundo».
El alcalde, presente en la misa funeral celebrada este sábado a las 17 horas en la catedral de Santa María la Real de la Almudena, ha querido mostrar sus condolencias en el nombre del pueblo de Madrid a una figura que «siempre buscó la verdad desde el Evangelio» y cuya hondura teológica ha sido «como pocas en la historia».
«Los dos países que más visitó como papa fueron Alemania, su patria, y España», ha destacado, haciendo hincapié en la Jornada Mundial de la Juventud de 2011 celebrada en Madrid y que reunió a miles de jóvenes.
Además, el primer edil matritense ha querido destacar la «generosidad» de Benedicto XVI al renunciar a su papado cuando «no se vio en condiciones», convirtiéndose así en el primer papa emérito después de siete siglos.