Dos décadas de feria no se cumplen cada día. Sant Joan celebró durante la jornada de ayer el vigésimo aniversario de su feria artesanal, agrícola e industrial. El buen tiempo acompañó y visitantes y vecinos salieron a la calle para disfrutar de un domingo veraniego en el que el sol fue protagonista en las calles de la localidad.
Los puntos de venta tradicionales de ollas y utensilios para la cocina, así como los de productos artesanales llamaron la atención de los visitantes. Además, la comida también fue protagonista: sobrasada, miel, queso o frutos secos deleitaron con su aroma.
Este año, la plaza de la Constitució se convirtió en un espacio de artículos de segunda mano y también acogió la muestra de animales y aves.
A pesar de la coincidencia de ferias en distintos puntos de Mallorca, numerosos políticos se acercaron hasta Sant Joan. El alcalde del PP, Joan Magro, estuvo acompañado por Catalina Cirer. El presidente de CxI, Josep Melià, también acudió y tampoco faltaron el conseller insular de Cultura, Joan Font, y el fundador de la Lliga, Jaume Font. Un santjoaner lo dejó claro: «De polítics, n'hi ha per regalar i per vendre!».