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Nevadas históricas en Mallorca

La Rambla, bajo un manto de nieve en 1936, con algunos coches circulando bajo los copos. | Archivo UH (Prohibida su reproducción)

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Cada nevada que se produce en Mallorca se vive como un acontecimiento histórico. Al fin y al cabo, esta isla mediterránea disfruta de sus playas seis meses al año y los días soleados son una constante. Pero, ¿qué pasa cuando nieva en Mallorca? Los mallorquines acuden en masa a la Serra de Tramuntana para disfrutar de tan exótico fenómeno meteorológico. Hacer un muñeco de nieve es un placer del que se disfruta en pocas ocasiones.

Si hay una nevada que aún queda en el imaginario reciente es la de 2012. Incluso pueblos de la Serra quedaron incomunicados y tuvo especial incidencia en los municipios de Palma y Calvià. Los expertos destacan que es la segunda nevada más importante de los últimos cincuenta años. Otra nevada destacada de este siglo se produjo en 2005, cuando se pudo ver nieve a pie de playa.

Pero ninguna llegó al récord histórico de la nevada de 1956. Conocido como el Año de la Nieve, la Isla estuvo durante casi un mes bajo el manto blanco. Mallorca vivió una pequeña era glacial que afectó a toda Europa. De hecho, en la estación del Lago Estaganto, en el Pirineo de Lleida, se registraron 32,5 grados bajo cero el 2 de febrero de ese año. Y en cuanto a ciudades europeas, San Petersburgo batió récords con -35,6 ºC.

En ese histórico año nevó en todos los municipios de la Isla, con temperaturas extremas de 13,5 grados bajo cero en Lluc y capas de nieve de sesenta centímetros. Además de por su intensidad, también se caracterizó por su duración: Mallorca estuvo nevada durante 17 días, desde el 3 de febrero hasta el día 20. La hemeroteca recuerda este evento.

También queda en el recuerdo la nevada de 1953, cuando Lluc estuvo aislado durante quince días y se alcanzaron los -13,5ºC. Por otro lado, en los registros históricos queda patente que entre los siglos XVI y XVIII Mallorca vivió una pequeña era glacial.

El Puig Major, la cumbre más alta de la Isla con 1.445 metros, tiene una media de 14 días de nieve al año. Otras cimas que suelen quedar cubiertas son El Tomir, Massanella y Teix. Lluc y su carretera de acceso son las zonas más afectadas por las nevadas. Está por ver si este invierno disfrutaremos de la visita de la nieve a pie de playa. Mientras tanto, siempre queda el recuerdo fotográfico de este exótico fenómeno invernal.

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