Andratx ha vivido una legislatura convulsa. La vara de mando ha pasado por las manos de hasta cuatro alcaldes de diferentes partidos. En un principio, PSIB-PSOE, el PI y Més per Andratx se dividieron la presidencia del Consistorio, mandando a la oposición al Partido Popular, que había sido el partido más votado en los comicios de 2019. Sin embargo, un giro de guión provocó que en julio de 2022 una moción de censura, apoyada por el PI y Cs, aupara a Estefanía Gonzalvo, del Partido Popular, al frente de la alcaldía. La propia Gonzalvo define su acceso al frente del ayuntamiento como un acto de «máxima responsabilidad y valentía» teniendo en cuenta que solo quedaban once meses para el paso por las urnas. «Más aún –subraya- conociendo la situación de parálisis administrativa que se había instalado en el consistorio».
Una de las primeras decisiones adoptadas fue la rebaja de impuestos. Gonzalvo, que también dirige las áreas económicas – Hacienda, Intervención, Tesorería, Recaudación, Contratación y Catastro–, llevó a pleno la modificación de las ordenanzas fiscales reguladoras del Impuesto sobre Bienes Inmuebles, el Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica y el Incremento del valor de los terrenos de naturaleza urbana, conocido como ‘plusvalías’. «Está claro que una bajada de impuestos reactiva la economía y, aún más, con la inflación por las nubes», expone la alcaldesa. Además, Andratx ha sido pionera en garantizar la gratuidad de la etapa de 0-3 años en las escoletas municipales. «Se trata –explica- de una medida más que justa; no podíamos consentir que hubiera alumnos de primera y de segunda, y por eso hemos conseguido que las 88 familias que este curso tienen a sus hijos en esa etapa se beneficien de un ahorro de 1.200 euros por niño». El Ayuntamiento está además ultimando las bases reguladoras para la convocatoria de una línea de ayudas destinada a la adquisición de una primera vivienda, con una partida inicial de 60.000 euros. El Ajuntament contribuirá de esta forma a la adquisición de viviendas de nueva construcción o de segunda mano, con dos requisitos: que el precio no sea superior a los 280.000 euros y que la superficie construida sea como máximo de 130 m2. En cuanto a los criterios de valoración para acceder a estas ayudas, que van a ser compatibles con otros incentivos que puedan aportar otras instituciones, los solicitantes que acrediten acumular mayor antigüedad de residencia en el municipio obtendrán más puntos.
Explica Gonzalvo que, con esta medida, se apuesta por beneficiar a los ya residentes, con el objetivo de que «no tengan que abandonar el municipio debido a los elevados precios de la vivienda». En determinadas circunstancias se podrá además obtener puntuación extra. En concreto, se prevé facilitar el acceso a estas ayudas de las familias numerosas, las monoparentales, las personas titulares de la vivienda que estén en situación de discapacidad o con algún miembro en esta circunstancia, personas que hayan sufrido una ejecución hipotecaria previa de su vivienda habitual, o que hayan dado su vivienda habitual en pago de la deuda, y las unidades de convivencia en las que alguno de sus miembros haya acreditado haber sido víctima de violencia de género. La primera edil subraya que, con medidas de este tipo, el Ayuntamiento «busca soluciones para paliar el sobrecoste de la vida» ante una elevada inflación que castiga desde hace meses la economía europea. Por último, y con el objetivo de incentivar el consumo en los establecimientos locales, el equipo de gobierno municipal ha creado también una línea de bonos comerciales, llamados ‘Queda’t a Andratx’, que han servido para reactivar el comercio y ha supuesto una importante inyección económica.