Con menos inquietud que la que padeció en octavos de final contra el eslovaco Lukas Lacko, el número uno del mundo, Rafael Nadal, sacó adelante el compromiso ante letón Ernests Gulbis (7-6(3) y 6-3) y se situó en las semifinales del torneo de Doha, donde se enfrentará al ganador del choque entre el ruso Nikolay Davydenko, vigente campeón, y el croata Ivo Karlovic.
Tiene Nadal tomada la medida a Gulbis. El letón, años atrás una de las grandes esperanzas del mundo de la raqueta pero estancado a mitad del camino, nunca ha terminado de rematar con un triunfo las buenas sensaciones y la resistencia que ofrece al español.
En el cuarto enfrentamiento entre ambos, todos los anteriores acabaron con victoria del balear, Nadal tiró de paciencia y experiencia. Especialmente en el primer set.
Gulbis alterna golpes magistrales con errores garrafales. Esa inestabilidad, también en la concentración, es su losa. Mientras el talento le sostuvo hizo frente al español, que ganó la primera manga en el desempate.
La pérdida del set supuso un golpe para el letón, que bajó el nivel en el segundo y no se pudo reponer de la pérdida de su saque en el tercer juego. Nadal cerró el partido después de una hora y 52 minutos y se plantó en las semifinales, donde jugará contra el ganador del choque entre el ruso Nikolay Davydenko, cuarto favorito, y el croata Ivo Karlovic.