El 2025 se ha puesto cruel con el Real Mallorca, al que en menos de una semana se le han caído de las manos esos dos caramelos que le habían traído los Reyes Magos. El conjunto bermellón, un rival digno pero corto de armas, caía finalmente goleado por el Real Madrid en Yeda y se quedaba a las puertas de la gran final del domingo, el gran objetivo que se había marcado tras su abrupta salida de la Copa.
«El final afea lo que ha sido el partido», destacaba Jagoba Arrasate desde la sala de prensa del King Abdullah Sports Center de Yeda. «Hemos competido dignamente, pero nos llega el 1-0 en una acción que duele, tras una pérdida, y pensábamos que íbamos a tener alguna opción de empatar, pero no ha sido así», añadía el entrenador del Mallorca, que pasaba de puntillas por esa tangana que se formaba entre los jugadores de ambos equipos a la conclusión del encuentro. «Estaba pendiente del final, pero parece que alguno estaba fuera de sí», comentaba.
Arrasate explicaba que sus futbolistas lo habían dado todo: "Se han vaciado y están enrabietados, supongo que fruto del esfuerzo. Al final, te ves 0-0 al descanso y dejas el campo fastidado con esos goles finales. En mi caso, sigo con mis cosas y pienso que he visto cerca el empate en el minuto 90 y de repente ya estamos 3-0. El equipo lo ha intentado, hemos competido, hemos querido estar ahí. Éramos el equipo más débil pero no estábamos aqui de casualidad".
Jagoba admitía, en cualquier caso, que el Mallorca no había podido responder tras el gol de Bellingham. "El gol nos hace daño por cómo es, por venir de una pérdida nuestra y una transición de ellos, que después han manejado bien el partido y han hecho que todo cambiara. Puede que nos haya faltado fuelle y pensábamos que los cambios nos los darían darían, pero han sido superiores".
En cuanto a la salida del campo de Antonio Raíllo, el técnico del Mallorca defendía la franqueza del central. «Él ha querido estar, pero llevaba toda la semana enfermo, sentía flojera y ha sido honesto. Es nuestro baluarte y ha sido una pena que se haya tenido que retirar», se lamentaba Arrasate.
El técnico de Berriatua cree que el Mallorca tiene toda la segunda vuelta para restaurar la ilusión que ha perdido con las últimas derrotas. "Hemos hecho una gran primera vuelta, pero contra estos rivales estamos aún un puntito por debajo. Tenemos margen de mejora, tenemos que centrarnos en la segunda vuelta porque el año no ha empezado bien pero hay alicientes suficientes para que lo tomemos como un reto. No es lo que queríamos pero tenemos estímulos por delante y muchas cosas que decir todavía".