El delegado del Gobierno en Andalucía, Pedro Fernández, se ha mostrado confíado en que este fin de semana, con ocasión de la final de la Copa del Rey de fútbol, que concentrará en la ciudad a unos 100.000 aficionados bilbaínos y mallorquines, «prime el buen ambiente» y sean unos días «de disfrute absoluto», al tiempo que ha agradecido a las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado el «extraordinario trabajo que realizan, en colaboración y coordinación con otras administraciones como el Ayuntamiento, sin olvidar unos 700 agentes de la seguridad privada».
Así lo ha expresado en declaraciones a los medios, donde ha subrayado el elevado número de seguidores de ambos conjuntos que llegarán a la ciudad: «eso tiene una parte muy positiva, como es el impacto en la economía de la provincia». No obstante, el delegado también ha señalado que con esta final, son seis las que se han celebrado en la ciudad de forma consecutiva, siempre con una masiva afluencia de aficionados.
«Es cierto que el aforo es limitado, en torno a 55.000, con lo que hay un porcentaje muy elevado de personas que van a estar sin entradas, especialmente de la afición del Athletic, pero se han habilitado espacios muy grandes (40.000 m2) junto a Torre Sevilla y el Parque del Alamillo, que esperamos sean capaces de dar cobertura a las necesidades de los aficionados, que vienen con ganas de disfrutar del deporte», ha añadido.
Fernández ha subrayado que más de 1.600 agentes, especialmente de Policía Nacional, de todas las unidades, conforman un amplio dispositivo para velar por la seguridad antes, durante y después del partido de fútbol, así como el hecho de que agentes de la Guardia Civil controlan los accesos a la ciudad. También se han establecido operativos en las estaciones de tren y en el aeropuerto.