No es ni el mejor día ni la mejor hora (21.00 h, GOL TV) para asistir a un partido de fútbol, pero ya se sabe que LaLiga tiene un nulo interés por los aficionados. Sin embargo, el partido que disputa este lunes el Mallorca ante el Athletic Club tiene una importancia capital para los de Luis García. Si el choque frente al Cádiz de la pasada jornada era clave en el devenir del curso, el de esta noche ante los ‘leones' tiene también un valor enorme. Sería magnifico repetir el ambiente del pasado sábado contra el once andaluz, pero el horario y el día son terribles para poder repetir un ambiente tan espectacular.
El conjunto de Marcelino García es una de las grandes sensaciones de la temporada, principalmente en la Copa, mientras que en la Liga le ha faltado la regularidad necesaria para poder situare en el vagón de cabeza. Es un gran rival y uno de los partidos más atractivos del curso. Pero sobre todo es un choque importantísimo para los bermellones en su escapada del vagón de cola.
Es un momento clave de la temporada porque los de LGP siguen teniendo la bala del partido aplazado ante la Real, lo que sin duda hace que los tres que hay en juego hoy tengan un valor incalculable si se logra también superar al conjunto donostiarra. La diferencia entre sufrir al final o llegar con más comodidad radica en no fallar en este momento, de ahí la necesidad de sumar los tres puntos.
Esta jornada fue muy positivo el empate del Cádiz para los intereses rojillos, pero no tanto el triunfo del Alavés frente al Valencia. Luis García tiene a casi todo su ejército de soldados disponibles. Solo Greif, Baba y Amath están fuera, pero el resto está en disposición de ser alineado. La presencia de Muriqi y su capacidad de rematar lo que le echen supone un nuevo punto en favor de los baleares y todo hace indicar que de nuevo el técnico madrileño apostará por jugar con dos puntas.
Angel, que se partió la cara el pasado domingo al intentar anotar un gol, podría ser de nuevo la pareja del kosovar. Ambos son dos hombres difíciles de marcar y aportan cosas diferentes al juego del Mallorca, lo que sin duda le hace más impredecible cuando el balón merodea el área rival. En este sentido el equipo rojillo ha ganado en capacidad de sorpresa.
Pero si importante es la aportación de Muriqi, también es fundamental la presencia de Sergio Rico y Antonio Raíllo atrás. El guardameta es un valor seguro bajo palos y ha finiquitado algo que era imprescindible cerrar: El debate en la portería. No son buenos los cambios más allá de tener un portero para la Copa y otro para la Liga.
En el campeonato doméstico es necesario consolidar un hombre fijo bajo palos y este, salvo lesión o sanción, será el sevillano. Un debate cerrado, al igual que el del centro de la defensa. Si positiva ha sido la presencia de Rico, el valor de tener otra vez a Antonio Raíllo atrás tiene un precio incalculable. Sin duda su regreso ha dotado al equipo de una mayor confianza atrás porque Valjent es mejor jugador, también Russo cuando tenga que volver a jugar e incluso Sedlar puede mejorar sus prestaciones. El denominador común, sin embargo, es disponer del cordobés en el campo.
A partir de ahí Salva Sevilla vuelve a tener un papel predominante a la hora de pensar por dónde tiene que ir el partido. El tiempo que el físico le dé es tiempo que el Mallorca tendrá la posibilidad de equilibrar el juego en la zona ancha. A partir de ahí habrá que tratar de neutralizar a un león mermado, pero que para nada deja de ser temible.
La vorágine competitiva ha dejado al Athletic debilitado con bajas como las de Vencedor, Nico Williams, De Marcos, Capa e Iñigo Martínez, pero además el técnico tendrá que refrescar piernas. Pero no será fácil. Para nada. El choque es de cinco estrellas y los puntos en juego fundamentales.