Doce jornadas después, la defensa del Mallorca ha encontrado cierta estabilidad. La línea del campo más castigada por la ola de lesiones y las salpicaduras de las sanciones —las dos últimas han sacado del terreno de juego a Jaume Costa y Sedlar— apenas había disfrutado del equilibrio en esta primera parte de la temporada, en la que Luis García Plaza ha tenido que utilizar hasta siete combinaciones diferentes por exigencias del guion. Despojado por un extenso periodo de tiempo del que debería ser su líder natural, Antonio Raíllo, y con una única pieza inamovible, la del eslovaco Martin Valjent, el sistema de contención del equipo isleño lleva cuatro jornadas seguidas luciendo el mismo traje, aunque hasta entonces se ha pasado en movimiento la mitad del camino.
En un campeonato marcado desde su origen por los sobresaltos de última hora, la defensa del Mallorca es una de las más vulnerables hasta el momento —junto a la delValencia, es la cuarta más goleada por detrás de las del Levante, el Cádiz y el Getafe, todos ellos situados en puestos de descenso— y a su vez una de las más erosionadas por los elementos. Tanto, que entre una y cosa y otra Luis García Plaza solo ha podido fotocopiar uno de los modelos utilizados: una línea formada por Maffeo, Valjent, Russo y Oliván que alineó por primera vez en agosto, en los partidos contra el Alavés y el Espanyol, y que ha repetido en las cuatro últimas jornadas frente a Real Sociedad, Valencia, Sevilla y Cádiz. En el resto de ocasiones, el técnico ha apostado por zagas de un único uso. Entre ellas destaca la de la visita al Santiago Bernabéu, en la que JoanSastre reemplazó a un Pablo Maffeo que solo ha perdido dos citas por problemas físicos y en la que el joven Josep Gayà debutó con el Mallorca para nivelar la carga de bajas que se amontonaba en el eje central.
En cualquier caso, las turbulencias continúan y aunque de cara al partido contra el Elche el técnico va a recuperar a Jaume Costa, no podrá apoyarse sobre la polivalencia de Sedlar, sancionado.
Punto de vista
Recurso a la roja de Luis García
El Mallorca ha recurrido la expulsión de su entrenador, Luis García Plaza, durante el partido del pasado domingo en el Nuevo Mirandilla de Cádiz. El club balear ha aportado como prueba un video en el que pretende demostrar que el técnico no se dirige en ningún momento al asistente y que, por lo tanto, no existe el menosprecio.