Casi siete años después, el Real Madrid volverá a competir sobre la hierba de Son Moix. La última vez que lo hizo fue el 28 de octubre de 2012, en una temporada que se cerró entre lágrimas para los dos equipos, ya que unos acabaron precipitándose por el barranco y los otros con las manos vacías. Desde entonces, la travesía por el desierto del Real Mallorca había impedido que volvieran a mirarse a los ojos, aunque ahora volverán a encontrarse el sábado (21.00 horas) en uno de los encuentros más esperados del curso y en una cita en la que los de Vicente Moreno, reconstruidos tras su victoria sobre el Espanyol, confían en lanzarle y ganarle otro pulso a la historia.
Goleada blanca
La última vez que el Real Madrid accedió con sus tanques al Camí dels Reis se llevó una abultada victoria (0-5). El equipo dirigido entonces por Joaquín Caparrós, del que no queda en la plantilla ningún superviviente de aquel día, apenas aguantó unos minutos en pie frente al de Mourinho, del que aún resisten Sergio Ramos, Varane y Modric. Un gol de Gonzalo Higuaín abrió el fuego a los ocho minutos y otro de Cristiano Ronaldo, a los 22, dejó el partido claramente inclinado hacia el costado visitante. Tras el descanso volvieron a marcar el argentino y el portugués y José Callejón, ya en los instantes finales, abrochaba una goleada que dejaba al Mallorca en la zona media y a los merengues en la cuarta posición.
Diluvio y dimisión
La última victoria del Mallorca sobre el Madrid con la Liga como telón de fondo y en Son Moix data de la temporada 2005-06. Unas semanas antes, Gregorio Manzano había recogido el hilo de Héctor Cúper y aunque el equipo andaba instalado todavía entre las plazas de descenso, había regenerado su autoestima con un triunfo en el campo del Málaga (0-2). El Madrid llegaba tocado, a un punto del Valencia y a siete del Barça, y no podía permitirse más tropiezos si quería seguir enganchado a la pelea por el título. Con López Caro a los mandos, se presentó con un once compuesto por Casillas, Cichinho, Ramos, Raúl Bravo, Roberto Carlos, Beckham, Zidane, Gravesen, Robinho, Baptista y Ronaldo Nazario. Ramos destapó el marcador en el primer tiempo, pero tras el descanso y bajo una intensa lluvia el Mallorca firmó un triunfo monumental gracias a los tantos de Pisculichi y Arango que provocaron, en los días posteriores, la dimisión de Florentino Pérez como presidente (2-1). Ese año en el vestuario del Mallorca también había un japonés, Yoshito Okubo, que sumó a la fiesta en los postres para sustituir al venezolano Arango.
Una alegría en la Copa
Fuera de los márgenes de la Liga, el Mallorca también tumbó al Madrid en su estadio en el curso 2007-08, aunque esta vez en la Copa del Rey. Era la ida de los octavos de final y los bermellones, con goles de Trejo y Arango, arrinconaron a los de Schuster, que mantenían el tipo con una diana de Higuaín (2-1). El Mallorca repetiría luego en el Bernabéu con un tanto de Ibagaza y la colosal actuación de Moyà (0-1).
Un bautismo estelar
En la plantilla que dirige Vicente Moreno solo hay cuatro jugadores que se hayan enfrentado en alguna ocasión al Real Madrid durante su carrera. Son Manolo Reina (2 veces), Salva Sevilla (6), Fabricio Agosto (2) y Álex Alegría (4). De todos ellos, el único que se ha impuesto a la escuadra blanca es el centrocampista almeriense, que la derrotó siendo futbolista del Betis en la campaña 2012-13. El Mallorca, que espera recibir a los de Zidane con su once más característico, ya sueña con ser el primer equipo que hace doblar la rodilla al Madrid en lo que va de campeonato.