Conor McGregor ha vuelto a revolucionar Port Adriano, uno de los rincones más exclusivos de Mallorca, con una escena digna de su leyenda: el luchador irlandés se grabó realizando series de esprints en mitad de la carretera, en la pronunciada cuesta que da acceso al puerto y con el tráfico abierto.
La imagen, difundida en sus redes sociales, sorprendió a residentes y turistas de la zona, que no daban crédito al ver al excampeón de la UFC —sin camiseta y visiblemente entregado— entrenándose en medio de la carretera. La cuesta ha servido de improvisado circuito de alta intensidad para el irlandés.
El futuro competitivo de McGregor, que ya tiene 36 años, sigue siendo una incógnita, pero sus publicaciones confirman que sigue manteniéndose en forma. De nuevo ha viajado a la Isla junto a su mujer, Dee Devlin, y sus hijos, y están disfrutando de unas vacaciones que mezclan lujo y exhibiciones de fuerza.
En su cuenta de Instagram también ha compartido imágenes más relajadas: paseos familiares por el puerto, vueltas en una bicicleta eléctrica Porsche valorada en 10.000 euros, fumando puros, brindando con chupitos y repartiendo propinas de 200 euros. Todo ello acompañado, como es habitual en su estilo de vida, por un exclusivo coche, un Ferrari, que no ha pasado desapercibido entre los curiosos.
Port Adriano, donde se encuentra su lujosos yate amarrado, vuelve así a ser escenario de una de las muchas visitas del luchador a Mallorca, destino que se ha convertido ya en una cita imprescindible en su calendario. Uno de sus lugares favoritos para descansar... y, como ha demostrado, nunca pasa desapercibido.
Tot un líder espiritual pels votants de ppvox