La Bahía de Palma es uno de los campos de regatas más solventes del mundo. Pero hay unas condiciones que no le son propicias. Cuando el viento predominante es de nordeste muy flojo y el cielo está encapotado, las posibilidades de poder competir son escasas. En estas circunstancias no se puede contar con el Embat. Por desgracia, las dos últimas jornadas del 71º Trofeo Ciutat de Palma se han visto afectadas por este panorama y no ha sido posible realizar ni una sola de las seis últimas pruebas previstas. Ningún otro deporte está tan condicionado por la meteorología como la vela.
Con todo, la regata organizada por el Real Club Náutico de Palma, la más antigua de Baleares, ha hecho entrega esta tarde sus trofeos gracias a que los dos primeros días (domingo y lunes) se dieron seis salidas y sus correspondientes llegadas a cada uno de los cuatros grupos en que se dividió la flota, formada por más de 300 barcos de la clase Optimist procedentes de 18 países.
La exhibición del ucraniano Sviatoslav Madonich, con cinco primeros y el descarte de un noveno en las dos únicas jornadas de competición, terminó siendo decisiva. El joven regatista de Odesa, residente en Italia desde el inicio de la invasión rusa a finales de febrero de este año, se alzó con la victoria e inscribió su nombre en la peana de la histórica Carabela de Plata del Real Club Náutico de Palma (RCNP), organizador del evento desde 1950.
«Es un honor representar a mi país en las principales regatas mundiales y espero hacerlo algún día en unos Juegos Olímpicos», aseguró Madonich, envuelto en la bandera amarilla y azul de Ucrania. Su entrenador, Paulo Dontsov, entregó un presente al presidente del Real Club Náutico de Palma y recordó, desde la tarima donde se entregaron los premios, el sacrificio de los soldados que luchan en su país. Todo el público asistente a la ceremonia dedicó una cerrada ovación al campeón.
El mallorquín Hugo Rodríguez, del Club Nàutic S'Arenal, se colgó la medalla de plata, a sólo dos puntos del vencedor. Cerró el podio Joan Domingo, del Club Nàutic de Cambrils, gracias a su regularidad los dos días de regatas y a que pudo descartarse una bandera negra. Blanca Ferrando, en representación del Real Club Náutico de Valencia, cuarta en la general, fue la mejor regatista femenina.
Manu Fraga, director deportivo del RCNP, reconoció que la falta de viento el martes y el miércoles resultó un poco frustrante para la organización. «Por fortuna, arrancamos el domingo con cuatro regatas que ya nos permitían dar validez al trofeo, a las que pudimos añadir otras dos el lunes. Nos hubiese gustado presenciar la lucha entre los mejores del Grupo Oro, pero éste es un deporte que no depende únicamente de nosotros, sino de la meteorología, y debemos aceptarlo».
El Trofeo Ciutat de Palma ha sido exclusivo de la clase Optimist por primera vez en sus 71 años de historia. «Hemos querido centrar el esfuerzo organizativo en la vela infantil, uno de los símbolos de nuestro compromiso como club», añade el responsable deportivo del RCNP. El 71º Ciutat de Palma forma parte este año del Circuito Excelence Cup 2022-2023, la liga de regatas española de Optimist, hecho que ha propiciado la participación final de 330 barcos.
«El Trofeo Ciutat de Palma es, junto a la Copa del Rey, el Trofeo Princesa Sofía y PalmaVela, una de nuestras cuatro citas anuales más importantes y la que quizás representa mejor la función social, deportiva y de formación que desarrolla nuestro club. Tiene, además, el aliciente de ser una regata con una larga historia», resalta Emerico Fuster, presidente del RCNP, presente en la entrega de trofeos junto al alcalde de Palma, José Hila; el concejal de deportres, Francisco Ducrós; la presidenta de la Federación Balear de Vela, Cati Darder; el capitán marítimo de Mallorca, José Escalas; el jefe del sector naval de Baleares, Javier Núñez de Prado; el coronel Rafael Baena, en representación del Ejército de Tierra; y el vicepresidente y el vocal de vela del RCNP, Juan José de Salabert y Hugo Ramón, respectivamente.