La venezolana Yulimar Rojas, dos veces campeona mundial y subcampeona olímpica de triple salto, ejecutó este viernes en su pista talismán de Madrid el mejor salto de la historia: 15,43 metros en su último salto. Atrás quedaron, en el ránking histórico, los 15,36 que la rusa Tatyana Lebedeva obtuvo el 6 de marzo de 2004 en Budapest.
La campeona mundial bajo techo empezó con un nulo muy largo, ajustó en el segundo para ponerse en cabeza con 14,65, volvió a hacer nulo en el tercero y en el cuarto, con 15,29, puso ya en grave riesgo el récord mundial.
Rojas volvió a cometer un nulo en la penúltima ronda y se despidió con una carrera explosiva y un triple vuelo majestuoso que la llevó a aterrizar a 15,43 metros de la tabla.
La cubana Liadagmis Povea, compañera de entrenamientos de la venezolana bajo la dirección de Iván Pedroso, terminó segunda con 14,52 y la portuguesa Patricia Mamona -vencedora del World Indoor Tour de triple en 2019-, tercera con 14,28.
Autora de la segunda mejor marca de la historia (15,41, el 6 de septiembre pasado en Andújar), Yulimar Rojas se había estrenado en la campaña bajo techo con su mejor registro: 15,03 en Metz, Francia). Era la octava triplista de la historia que superaba los 15 metros en pista cubierta.
Junto a la mejora de su técnica, bajo la supervisión de su entrenador, el multicampeón mundial de longitud Iván Pedroso, la venezolana se ha propuesto «ser más aguerrida, echarle más coraje» a este año olímpico, en busca del oro en Tokio 2020.
Madrid, a 60 kilómetros de Guadalajara, donde se entrena habitualmente, se ha revelado una plaza propicia para Yulimar Rojas, que rompió aquí por primera vez el muro de los 15 metros y, a cubierto, ha mejorado cuatro veces su marca personal. La española Patricia Sarrapio terminó séptima con 13,58 -marca del año- y María Vicente, campeona de Europa sub-20, octava con 13,37 en su primer triple de la temporada bajo techo.