Golden State Warriors 129 - Cleveland Cavaliers 120 (71-60 al descanso).
Golden State Warriors: Curry (34), Thompson (11), Durant (39), Green (10) y Pachulia (-), -cinco inicial-; Iguodala (20), Livingston (5), West (4), McCaw (6) y Barnes (-).
Cleveland Cavaliers: Irving (26), Smith (25), James (41), Love (6) y Thompson (15), -cinco inicial-; Deron Williams (-), Jefferson (4), Shumpert (-) y Korver (3).
PARCIALES: 33-37, 38-23, 27-33 y 31-27.
ÁRBITROS: Derrick Stafford, Ed Malloy, Dan Crawford. Sin eliminados.
PABELLÓN: ORACLE Arena. 19.596 espectadores.
Los Golden State Warriors se llevaron el anillo de campeón de la NBA gracias a su victoria este lunes en el quinto partido de la serie ante Cleveland Cavaliers (129-120), comandados por la enésima exhibición de Kevin Durant, con 39 puntos y nombrado MVP de las Finales, y Stephen Curry, con 34, que volvieron a brillar para dejar el anillo en la Bahía de San Francisco, pese a la resistencia de LeBron James.
De este modo, los de Steve Kerr se tomaron la revancha de la derrota del año pasado y en esta ocasión no dieron margen a la remontada de su rival, que en 2016 levantó un 3-1. La franquicia de San Francisco demostró por qué ha sido la mejor toda la temporada, reforzada por el estelar fichaje de Kevin Durant, y sumó su quinto anillo.
Un equipo de leyenda que ha escrito su segunda página en los anales de la historia de la liga y, a golpe de récord, ha hecho gala de una autoridad y un talento digno de los mejores equipos que ha dado este deporte ante el que nada pudieron hacer los 'Cavs', de nuevo casi siempre por detrás en el marcador.
Los visitantes comenzaron mejor el encuentro, aprovechando sus oportunidades en ataque y varias pérdidas consecutivas de los Warriors que les dieron el liderato en el marcador con Kyrie Irving y LeBron James que cuajaron una espectacular actuación para su equipo, junto a la aportación de Kevin Love, J.R. Smith y Tristan Thompson que decantaron la balanza a su favor en los primeros 12 minutos.
Sin embargo, el pobre porcentaje de Golden State en este tiempo aumentó ostensiblemente en el segundo período, dejando un parcial de 27-4 en cuatro minutos de juego en el que Durant y Curry empezaron a dejar su huella en el partido. Además, Andre Iguodala tuvo una aportación vital para su equipo desde el banquillo, con 20 puntos, en detrimento del georgiano Zaza Pachulia, que más que sumar, lastraba a los de Oakland el tiempo que permanecía en pista.
De esta manera, Warriors comenzó a distanciarse en el marcador ante unos Cavaliers que sobrevivieron gracias a un infalible J.R. Smith desde más allá de la línea de tres, justo cuando su equipo más lo necesitaba, para marcharse al descanso con un déficit recuperable (71-60) que hacía creer a los de Tyronne Lue.
Así, Cleveland fue recortando poco a poco y entró con serias opciones en el cuarto final (98-93), pero acusó el cansancio físico, sobre todo en un Irving que ha dado una auténtica exhibición durante los cinco partidos, pero al que se le vio con muchas dificultades para terminar el partido en plenas condiciones.
Durant volvió a tomar las riendas para dejar en nada la monstruosa actuación de James, que sumó 41 puntos, 13 rebotes y 11 asistencias para promediar 'triple-doble' en toda la serie; evitaron que el gran refuerzo de los Warriors en esta temporada sumase por fin su primer anillo.