El velódromo Palma Arena tendrá una nueva pista el próximo verano, totalmente reformada y homologada, como resultado de las obras que los constructores de esta instalación deportiva han de llevar a cabo entre marzo y abril del año que viene, actuación que no costará nada a la comunidad autónoma.
El coste cero, no obstante, es relativo en este caso ya que, como ha explicado hoy en rueda de prensa el delegado de Presidencia del Govern para el Deporte, Diego González, la comunidad autónoma pagó en su día ya unos 4 millones por esta instalación que se construyó mal y no ha podido ser homologada debido a sus graves deficiencias.
«Los ciudadanos y ciudadanas de Baleares pagaron esta instalación homologada y, a día de hoy, no lo es y a eso están obligados los constructores», ha recalcado González, quien ha subrayado que éstos por el momento ya han entregado el proyecto técnico para la nueva pista, que se ha remitido a la UCI para que ésta le dé «el OK».
La respuesta de la Unión Ciclista Internacional (UCI) se espera desde hace ya 15 días, según ha apuntado el director del Palma Arena, Joan Llaneras, por lo que calculan que su decisión sobre el proyecto es «inmediatamente», ha agregado González