El Mallorca se somete esta noche al primer análisis serio desde que eclosionó la nueva temporada. El conjunto bermellón, marcado por las dudas que han provocado sus últimos desfiles, se mide en su base de operaciones a un Valladolid pujante que todavía no ha acabado de digerir los elogios de su actuación más reciente. Los de Manzano, en cambio, intentarán bloquear las salidas de Son Moix y, al mismo tiempo, olvidar el mal sabor de boca que ha propiciado el accidentado empate de Almería (ONO Estadi, PPV, 20:00 horas).
Estados de ánimo
El encuentro confrontará los estados de ánimos de baleares y pucelanos. Aunque los dos viajan en el mismo vagón del torneo (comparten el mismo números de puntos y de goles), unos, los locales, vienen de soportar la primera tormenta otoñal y los otros, los visitantes, acaban de poner contra las cuerdas al campeón a base de fútbol, entrega y coraje, lo que ha desatado un torrente de críticas positivas sobre su vestuario. En cualquier caso, el Mallorca vuelve a partir con un par de metros de ventaja. Los rojillos, pese a dejarse dos puntos en el estadio de los Juegos Mediterráneos, demostraron que en cualquier momento pueden recuperar las sensaciones que expusieron, por ejemplo, en la primera jornada. Y hoy parece el día indicado para hacerlo. En casa, con el traje de gala y ante un rival teóricamente inferior. Además, existe la sensación de que los de Mendilibar podrían registrar una bajada de tensión muy parecida a la que sufrió su último oponente tras pasar por el aro madridista.
A pesar de lo que dicta su manual, Manzano se ha sumado a la política de rotaciones para evitar la acumulación de kilómetros en las piernas de los jugadores. El técnico de Bailén ha optado por oxigenar al grupo en la semana más dura de este nacimiento de curso (tres partidos en ocho días) y dejó anoche fuera de la convocatoria a Ballesteros, Tuni y Pereyra. De esta forma, David Navarro disputará sus primeros minutos como mallorquinista en el eje de la zaga y Basinas será el encargado de llevar el timón en la sala de máquinas. Para llenar el sitio de Tuni en la banda izquierda, el andaluz dispone de varias posibilidades. Una de ellas es situar ahí a Jonás y que Varela ocupe el costado derecho (o viceversa), aunque existe la opción de que el Chori Castro aparezca sobre el césped desde el primer minuto. La otra gran noticia de la convocatoria es la reaparición del argentino Óscar Trejo y el estreno de Francisco Molinero, que vuelve tras su lesión de la pretemporada.