Han pasado veinticinco años, pero el Club Atletismo Fidípides conserva la ilusión de aquel 1981 en el que se inició un sueño que alcanza el cuarto de siglo de vida. La carismática entidad celebró tal onomástica a lo grande, con una cena de gala en el Gran Casino de Mallorca y la disputa del X Memorial Aina Ramón, una de las clásicas del calendario atlético otoñal en la Isla. El encuentro a manteles fue el epicentro del amplio programa de actos que arrancó con un concurso de dibujo y dio paso al ágape, en el que hubo muchos nombres propios. Entre ellos, destacó el de Fermín Cacho, quien apadrinó tan simbólica onomástica y atendió a todos los aficionados que quisieron conocer al campeón olímpico de 1.500 metros en Barcelona'92 y plata en Atlanta'96 sobre la misma distancia. El soriano recibió un caluroso tributo de la gran familia del Fidípides, al igual que su atleta más emblemático, Emilio de la Cámara, mejor atleta veterano estatal los años 2004 y 2005. Jesús Berzosa también fue obsequiado con una placa conmemorativa por su apoyo al atletismo y se erigió en otro de los actores principales de la cena en el Gran Casino de Mallorca, punto de encuentro para el atletismo mallorquín.
La disputa este domingo del VIII Cross Emilio De la Cámara servirá de broche de oro al 25º aniversario del Fidípides, al que también asistieron, además de la directiva y los atletas del club, otras personalidades como el maratoniano olímpico Toni Peña, o representantes de las principales instituciones del archipiélago, como Xisco Lliteres (Govern), Antoni Palerm, director del àrea d'Esports de s'Institut, o Javier Morente, quien en nombre de Institut Municipal de l'Esport del Ajuntament de Palma (IME), recogió, al igual que el resto de autoridades, una placa en recuerdo de una velada que hace del Fidípides toda una leyenda dentro del atletismo balear y nacional.