El Mallorca no se queda de brazos cruzados. Lejos de admitir el fallo del Comité de Competición desestimando su petición para unificar los horarios del Sevilla-Real Madrid y el Levante-Barcelona, la SAD balear pasó ayer al contraataque. En un comunicado oficial publicado ayer en la página web, el club isleño entiende que «esta resolución supone un incumplimiento de lo prevenido por los estatutos de la RFEF y por tanto los servicios jurídicos estudian las acciones legales a emprender en el supuesto de que se produzca un perjuicio deportivo para nuestra entidad». Los duelos en el Pizjuán y el Ciudad de Valencia se disputarán el sábado, a las 20.00 y las 22.00 horas, según estaba previsto.
Competición, por delegación expresa del presidente de la RFEF, Angel María Villar, estudió en la mañana de ayer la solicitud, pero la rechazó ya que «no existe precedente alguno de unificar horarios a tres jornadas del final de la liga». Agrega que acceder a hacerlo «afectaría a los clubes de Primera en sus complejos intereses en relación con los días y horas programados por las televisiones». Los fundamentos jurídicos de la resolución del Comité indican que «no existe precedente alguno por el que se hubiera declarado horario unificado a tres jornadas del final del campeonato, tal como se viene haciendo en las seis últimas temporadas, y siempre por acuerdo entre la RFEF y la Liga Nacional de Fútbol Profesional».
«Ciertamente, el argumento esgrimido por el Mallorca podrá hacerse extensivo a otras jornadas y a otros clubes, en las que ya se venían apreciando las igualdades existentes entre equipos interesados por alcanzar la clasificación para competiciones europeas o para eludir el riesgo del descenso», agrega el texto. Competición añade que «con independencia de ello, acceder a lo solicitado por el Mallorca, afectaría de un modo directo a los clubes que integran la Primera división en sus complejos intereses en relación con los días y horas programados por las televisiones». El Mallorca solicitó el pasado miércoles que los partidos Sevilla-Real Madrid y Levante-Barcelona empezasen a la misma hora por entender que «el horario previsto, a las 20.00 horas el primero y a las 22.00 horas el segundo, podría distorsionar la competición en perjuicio» del club balear. Incluso se puso a disposición de la RFEF para adelantar al sábado su partido ante el Athletic de Bilbao, aunque finalmente se jugará en Son Moix el domingo a las 17.00 horas.