El mallorquín Carlos Moyá se incorporó ayer a los entrenamientos del equipo de Copa Davis español que se enfrentará la próxima semana a Australia en la final de Melbourne, y en el primer contacto con las pistas de hierba, tras un viaje de 20 horas desde Estados Unidos, asombró a sus compañeros. Juan Avendaño estuvo atento a las evoluciones del jugador mallorquín y manifestó su satisfacción por el trabajo de Carlos en la pista. «Estoy asombrado de lo bien que está tocando la pelota si tenemos en cuenta que lleva 20 horas de avión en su cuerpo y no ha descansado», dijo.
«Es evidente que Carlos ha llegado a Melbourne con una gran motivación por esta final de la Copa Davis. Es un reto para él, y sólo hay que verle para certificar que va a estará a tope para la final», comentó. La segunda jornada del equipo español de Copa Davis en Australia se dividió en dos sesiones de entrenamiento, ambas en las pistas de hierba del Club de Tenis de Kooyong.
En la sesión matinal, el equipo ha contado con la incorporación de Enrique 'Bebe' Pérez, entrenador de Alex Corretja, que llegó a Melbourne procedente de Uruguay. En la sesión de la tarde, el equipo contó ya con la presencia de Carlos Moyà, recién llegado de Miami, de su entrenador, Joan Bosch y de su preparador físico, Jan Schaefter. Hoy, procedentes de Los Angeles, Juan Carlos Ferrero y su entrenador, Antonio Martínez Cascales, tienen prevista su llegada a Melbourne para completar la delegación española para la final ante Australia.
En la sesión matinal, una de las pistas fue utilizada por Alex Corretja y Tati Rascón, mientras que Feliciano López compartió entrenamiento con José Ignacio Carrasco. La sesión fue seguida por numerosos medios de comunicación australianos, ya que el equipo 'aussie' retrasó dos horas el comienzo de sus entrenamientos para asistir al funeral de Bob Carmichael, uno de los grandes jugadores australianos fallecido el pasado lunes.
En la sesión de tarde, Carlos Moyà estuvo practicando junto a Tati Rascón en la pista 7, mientras que Alex Corretja y Feliciano López ensayaron jugadas de dobles enfrentándose a José Ignacio Carrasco y Francis Roig.
Carlos Moyà atendió también a los medios de comunicación australianos, que le preguntaron por sus declaraciones acerca de que era un error que Hewitt hubiera estado dos meses sin competir. «Cada jugador tiene su forma de ser y su forma de adaptarse a las situaciones», señaló el mallorquín. «Si yo estuviera dos meses sin jugar alta competición estoy seguro de que me costaría mucho encontrar mi nivel», añadió Moyà.
España tiene previsto realizar mañana otras dos sesiones en Kooyong. La sesión de la tarde deberá ser un poco más corta de lo habitual, ya que el sábado el club australiano inaugura su temporada de verano en una gran fiesta social en la que se abrirán a los socios las 23 pistas de hierba de la instalación. Tras el invierno, en el que las pistas de hierba están inutilizadas para la práctica del tenis, el club trabajó especialmente en el mantenimiento de las 4 pistas que utilizan España y Australia para adelantar su apertura.
El español Feliciano López cree que la condición de favorito podría jugar en contra de Australia cuando la escuadra local y España se enfrenten en la final de la Copa Davis la próxima semana en Melbourne. «Toda la presión recae sobre ellos y nosotros deberemos sacar provecho del hecho de que por una vez no somos vistos como los posibles ganadores», dijo López. Feliciano, incluido en el equipo español reemplazando al ex campeón de Roland Garros Albert Costa, señaló que España espera repetir la hazaña de Francia, que en el 2001 derrotó a Australia en la final, también sobre césped y en el mismo estadio. «Ellos, una vez más, son claros favoritos. Pero no hace mucho que fracasaron ante los franceses», añadió el jugador, al que los medios locales, dan casi como seguro que podría reemplazar a Carlos Moyá en los partidos de individuales. «Para mí una victoria en Melbourne sería el triunfo más importante de la historia del tenis español», concluyó el jugador de 22 años.