«No nos sentimos representados por la asamblea». Este fue el categórico mensaje que trasmitieron los clubes mallorquines a Fernanda Caro. La consellera de Benestar Social, que días atrás escuchó la petición de los asambleistas de hacerse con el control de la Federación Balear de Fútbol (FBF) después de que Antonio Borrás del Barrio y su junta directiva haya sido inhabilitada, deberá ahora articular una solución para «pacificar» el fútbol, que anoche vivió su primera gran rebelión. Casi un centenar de representantes de clubes de la Isla, presidentes en su mayoría, solicitaron a Caro que aprovechara la tesitura para «democratizar» la Federación, al tiempo que reclamaron una mayor transparencia. Los clubes abogaron en su mayoría por romper con el pasado más reciente y abrir una nueva etapa.
La opción de Fernando Talens, antiguo secretario general de la FBF, parece generar consenso en el mapa futbolístico. El abogado mallorquín se postula como el nuevo presidente, aunque la confección definitiva de la gestora que asuma el control de la FBF y ponga en marcha el proceso electoral, continúa aparcada y es probable que no se conozca hasta el viernes. Rechazado por los propios clubes que la asamblea asuma el control de esta junta gestora, es probable que Fernanda Caro decida recurrir a una fórmula mixta. Los clubes realizaron diversas propuestas, incluso se puso sobre la mesa la posibilidad de que la gestora estuviera exclusivamente integrada por técnicos de la consellería, aunque los presidentes también subrayaron su interés en «despolitizar» las posibles soluciones de futuro.
En su decidida intención de dar un nuevo aire a la Federación y todos sus estamentos, los clubes descartaron casi por completo el nombre de Miguel Bestard para ocupar la poltrona presendencial. Al presidente de los entrenadores y responsable técnico de las selecciones se le identifica con el pasado. De hecho, Bestard fue nombrado por Antonio Borrás del Barrio, al igual que José Antonio Doménech Riera, presidente de los árbitros. En el caso de Doménech, éste anunció días atrás su intención de abandonar el cargo una vez que el Tribunal Superior de Justicia de Balears, en su Sala de lo Contencioso Administrativo, rechazara la suspensión cautelar solicitada por los abogados de Borrás. Después de entrevistarse con asambleistas y clubes, Fernanda Caro tiene ahora la palabra y la misión de formar la gestora que asuma el control de la Federación Balear de Fútbol y se encargue de poner en marcha el proceso electoral.