Llompart irrumpió en la sala de prensa entre aplausos, acabó llorando y se marchó con una ovación cerrada de los medios de comunicación. El técnico de Inca ensalzó la actitud y el trabajo de la plantilla, pero se emocionó cuando le dedicó el triunfo y la permanencia a Antonio Asensio: «Le dedico la salvación a mucha gente, pero en especial a Asensio y a su hijo», esbozó entre sollozos. El preparador explicó que Asensio Mosbah «ha bajado al vestuario y me ha dicho que no le fallado, al igual que hice con su padre», agregó entre lágrimas.
Apenas 180 minutos le han bastado a Llompart para cambiar la dinámica de un Mallorca que olía a cadáver tras perder ante el Betis. La ilusión y el trabajo que ha esparcido el entrenador bermellón sobre el vestuario mallorquín han bastado para que el grupo balear lograra la permanencia. El punto de Chamartín y el triunfo ante el Valladolid le han dado vida al Mallorca y el preparador rojillo, eufórico, aseguraba ayer tras el choque que «estos jugadores han hecho dos partidos para no poder dudar de su profesionalidad, son unos futbolistas extraordinarios», comentó.
Sobre el sufrimiento después de que el Valladolid se adelantara en el marcador, Tomeu Llompart significó que «les dije en el descanso que nadie bajara los brazos, porque me revelaba con el 0-1. Creo que ha sido el partido en el que más ocasiones de marcar hemos tenido y sabía que no era justo que perdiéramos». Interrogado sobre su continuidad en el banquillo, Llompart comentó que «me gustaría seguir, pero no depende de mi. Soy un hombre de club y el Mallorca hará lo que crea conveniente», destacó el técnico. Por su parte, Pepe Moré explicó que «vinimos a Palma a ser honrados y a no perjudicar a nadie. Controlamos el partido hasta que ellos empataron».