A por todas. El Real Mallorca no saldrá a especular ni con el partido ni con el resultado mañana jueves en el Louis II ante el Mónaco. Pese a que se logró un marcador muy favorable en el partido de ida que deja las cosas casi sentenciadas, el grupo de Vázquez es consciente que sería un suicidio plantarse al borde de su área y jugar a las órdenes de un sistema conservador.
Una de las principales preocupaciones del preparador rojillo estriba en saber si podrá contar o no con el serbio Jovan Stankovic. El interior entrenó ayer al margen de sus compañeros y seguía con molestias en la rodilla izquierda. La resonancia magnética efectuada desveló que no hay ningún tipo de rotura y que se trata simplemente de una fuerte contusión. El que esté sobre el césped depende, en gran parte, de él. Así lo confirmó Vázquez: «A día de hoy no podría jugar pero vamos a agotar las últimas posibilidades, esperemos que se recupere, que su evolución sea rápida y pueda el jueves estar con nosotros. Sin embargo yo tengo claro que en este tipo de situaciones es el jugador quien me va ha decir si está para jugar o no», destacó el preparador rojillo.
Vázquez tiene muy claro que «si Jovan tiene la más mínima duda, no jugará», concluyó. El técnico sabe que el encuentro de mañana noche será muy exigente en todos los sentidos y necesita que todos los futbolistas estén al cien por cien para afrontar el reto de jugar frente a un equipo que tiene ánimo de revancha.