El grupo de Vázquez regresa a la competición doméstica en busca del crédito que sólo adquiere en su tránsito continental. Otro equipo con dudas y problemas "el Málaga" pondrá a prueba la solvencia de un Mallorca que necesita puntos y coser un partido convincente en Son Moix para abandonar su estado de depresión. Ocho goles encajados en dos partidos delatan fragilidad y en la zona de cobertura parece radicar uno de los principales argumentos que han acomodado al Málaga en las mazmorras.
Joaquín Peiró, el hombre del ascenso, no ha dudado en mover pieza en busca de soluciones y Contreras, guardameta titular en este primer tramo de la Liga, verá el partido desde el banquillo. En el bando local la consistencia defensiva es mayor, pero las secuencias de encefalograma plano también mantienen al equipo balear entre los más mediocres. Fernando Vázquez, que celebra aniversario "cumplirá 45 años de edad" no ha dudado en reclamar a sus futbolistas «una victoria» para celebrar una efemérides tan especial, aunque también se ha apresurado a ensalzar las virtudes que ha paseado su rival malagueño en la apertura del curso.
«El Málaga tiene mucho peligro, siempre marca goles y casi siempre se adelanta en el marcador. Será un partido abierto. El Málaga está jugando bien, a los grandes siempre les crea problemas», significó el preparador mallorquinista en el transcurso de su último encuentro con los medios de comunicación.