No ha tenido problemas el cabeza de serie número dos del Mallorca Open, Àlex Corretja, para acceder a los cuartos de final. Al menos uno de los nombres importantes, de los que llevan gente a la pista, sigue en competición. La eliminación de Carlos Moyá y las retransmisiones deportivas no ayudan a llenar la plaza. El partido que cerraba la jornada se retraso, pero no fue problema para que Corretja finiquitara en dos sets a Alberto Marín por 6-1 y 6-2 y no prolongase la jornada como en días anteriores.
La veterania de Corretja se impuso con claridad. El jugador catalán sólo cedía tres juegos ante un Alberto Martín que no ha despuntado todo lo que se esperaba de él.
La jornada se abría a la una con un pista prácticamente vacía pero con un joven tenista, Juan Carlos Ferrero, llamado a ser la esperanza del tenis español. Ayer frente al búlgaro Orlin Stanoychev, al que ganó 6-3 y 7-6 (4), demostró que sigue siendo un tenista de escuela, poniendo sus golpes a ambos lados de la pista y obligando al contrario a ganar los puntos. Si consigue mejorar su acercamiento a la red está claro que tenemos un futuro buen tenista.
En la pista uno Markus Hipfl y Gastón Gaudio luchaban para una
plaza en los cuartos de final el austriaco venció al argentino por
7-5 y 6-1.
La pista central volvía a contar con la presencia de un español,
Francisco Clavet que necesitó los tres sets para deshacerse del
alemán Jens Knippschild, 6-7 (3), 6-4 y 6-4.