El proyecto LEB del Bàsquet Inca ha entrado en cuenta atrás. La
Federación Española de Baloncesto (FEB) ha comunicado al club
mallorquín que deberá concretar su continuidad en categoría
profesional "Liga LEB" antes del 31 de mayo, circunstancia que
afectará sobremanera las gestiones para generar ingresos que viene
realizando el presidente Rubert y su equipo directivo, constituido
ahora en junta gestora, desde hace varias semanas. e Proceso
electoral
Esta fecha de caducidad también puede tener su influjo sobre el
proceso electoral en el que se encuentra inmerso el club ya que la
elección del nuevo equipo regente deberá producirse el 3 de junio,
fecha en la que se celebrará asamblea extaordinaria de socios. Tres
días antes expirará el plazo para la presentación de candidaturas y
será la gestora y no una hipotética nueva junta directiva la que
deba tomar la decisión de mantener o no la franquicia LEB.
No obstante, los sectores más influyentes del Bàsquet Inca consideran poco probable que aparezca una candidatura alternativa. Ante esta tesitura, Joan Rubert seguiría al frente de la entidad. Pese a los malos resultados deportivos que ha coleccionado la entidad durante las tres últimas temporadas, en el entorno del Bàsquet Inca las voces críticas con la gestión de Rubert, el único presidente que ha tenido la sociedad durante sus diez años de existencia, son escasas y la gran mayoría de los socios son partidarios de su continuidad en la poltrona. Es el responsable de una buena gestión económica y también del reencuentro de Malorca con el baloncesto de profesional.