Jovan Stankovic y Veljko Paunovic han vivido en sus propias carnes la situación prebélica que se está padeciendo en Yugoslavia. Los dos llevan allí tres días con motivo de los partidos internacionales que se debían disputar este fin de semana y que al final se han suspendido. Ahora salir de Yugoslavia no es nada fácil. El primero de ellos logró abandonar el país ayer al mediodía mientras que Paunovic sufrió mucho durante toda la jornada para intentar abandonar serbia y cruzar la frontera. Los dos jugadores estaban ayer muy afectados y tristes por el conflicto tan delicado por el que atraviesa yugoslavia y ayer, en la sintonía de Ultima Hora Radio los dos jugadores expresaban sus sentimientos de miedo y tristeza. Stankovic, además de manifestar su triteza por la situación que allí se vive, lamentaba no haber recibido ninguna llamada del presidente del Mallorca, Guillem Reynés. «Me han llamado Frontera y Cati, el presidente no me ha llamado, no debe saber que hay guerra en Yugoslavia, no le debe interesar», dijo Stankovic. El futbolista explicó cómo lo hizo para abandonar Yugoslavia. «Estábamos concentrados con la selección y en coches algunos jugadores cruzamos la frontera y fuimos a Hungría».
El jugador reconocía que la situación que ahí se vive es «horrible». «Hay miedo, mucho miedo, es increible lo que aquí se vive. En los hospitales no hay nadie, están vacíos de pacientes y preparados para recibir a posibles heridos. Nadie puede hacerse una idea de lo que hay aquí, es increible». El centrocampista serbio destacaba también que «en las calles no hay nadie, tampoco en las carreteras, todos están en casas o en refugios. Todos están encerrados». Jovan Stankovic y Veljko Paunovic están viviendo una pesadilla.