Gente llegada de todo el planeta acude estas semanas a París para, con o sin entrada, disfrutar de los Juegos Olímpicos. una cita única que hacía doce años que no se disputaba en Europa y que, por lo menos, no volverán hasta 2036, toda vez que Los Ángeles (Estados Unidos) acogerá la cita en 2028, que en 2032 regresará 32 años después a Australia para acogerlos la ciudad de Brisbane.
Además de los familiares, amigos y allegados de los deportistas baleares que toman parte en estos Juegos, numerosos isleños se han desplazado hasta la capital gala. Aficionados al deporte y familias que quieren vivir y disfrutar el ambiente de las calles e incluso, han tenido la oportunidad de presenciar en vivo algunas de las pruebas deportivas que se disputan, en ocasiones, en abierto por sus calles.
Es el caso de Antonio Sánchez Grao, responsable de relaciones externas del El Corte Inglés y conocido deportista aficionado y seguidor de la actividad que se genera en las islas. Junto a su pareja, Carmen, y sus respectivos hijo e hijas (Laia, Tomás y Carme) han paseado por las calles de París, viendo en directo el paso de la carrera de ciclismo en ruta masculina a su paso por Montmartre.
También, pero en esta ocasión siguiendo la competición de los 20 kilómetros marcha se ha visto al que fuera deportista de alto nivel en esta modalidad, Mario Avellaneda, junto a su pareja, Gema Clar y sus hijos, en el espectacular circuito con meta ante la Torre Eiffel, siendo testigos del doblete de medallas españolas.
Un hecho llamativo fue la llegada desde Argentina de un grupo de familiares, tíos y primos, de Juana Camilion, que se sumaron a sus padres y su hermana en las pistas de La Defensa para animar a la jugadora mallorquina de baloncesto 3x3, que aspira a medalla este lunes.