Adrián Pérez Galiano (Palma, 4 de marzo de 2002) ha vivido su semana mágica. Después de pasar por las canteras de Villarreal y Deportivo Alavés, el central zurdo mallorquín ha asomado la cabeza por el primer equipo del Tenerife y por partida doble. La semana pasada se estrenó en partido oficial con el conjunto dirigido por Pepe Mel. Fue en la Copa del Rey ante el Alfaro cuando salió en el once titular y en el minuto 72 fue sustituido por el también mallorquín Josep Gayà. Y el pasado domingo el técnico le dio la alternativa en Segunda en el duelo ante el Mirandés que acabó con triunfo del equipo chicharrero (1-0). Sustituyó a Ruben Alves en el minuto 79.
Adri Pérez era un niño de apenas doce años cuando la red de ojeadores del Villarreal se fijó en él. Estudiaba en el Colegio Balmes de la capital y disfrutaba con sus compañeros jugando en el Atlético Baleares. De repente, recibió una llamada para desplazarse hasta tierras castellonenses a realizar una prueba. Los técnicos del Villarreal dieron el OK y Adri pasó a formar parte de la filial del 'submarino amarillo'. Allí coincidió en la cantera con tipos hoy consagrados como el internacional Yeremy Pino.
Después de casi un lustro vistiendo de amarillo, Adri Pérez cambió de aires para tomar rumbo a Vitoria. Ingresó en el Deportivo Alavés en categoría juvenil y poco a poco se convirtió en uno de los pilares básicos del Alavés B, con el que debutó en Segunda B con apenas 18 años en la temporada 2020-21. En la siguiente temporada llegó a ir convocado con el primer equipo, dirigido por Luis García Plaza, aunque no llegó a estrenarse en un curso que acabó con el ascenso de los vitorianos a Primera División.
Esta temporada recaló en el Tenerife para militar en el filial. Sus buenas actuaciones en el equipo nodriza y el cambio en el banquillo (Pepe Mel sustituyó a Óscar Cano) le ha permitido dar un salto. La semana pasado completó su mejor semana con los estrenos en Copa y Liga y, sobre todo, la sensación de seguir creciendo. Destacar por ser un central con un buen juego aéreo, expeditivo y buena salida de balón.