Los torneos internacionales son un gran escaparate para los jugadores. Cada dos años (Mundial y Eurocopa o Copa América) concentran las miradas de los clubes en busca de nuevas piezas. El caso de Nico Williams no pasa desapercibido. El futbolista español está siendo el foco de todas las miradas. Su edad, su desborde y su potencial le hacen ser una pieza deseada por más de media Europa.
FC Barcelona, Bayern de Múnich, Chelsea o Liverpool han mostrado, deseosos, su interés por el actual jugador del Athletic Club. Sin embargo, en todo momento, el propio futbolista ha hecho oídos sordos a los cantos de sirena. Almenos hasta que acabe la competición europea, donde está capitaneando el barco de la selección hasta buen puerto.
De todos los interesados, el que más está apretando para fichar a Nico Williams es el club culé. En Europa se mueren por el desborde del extremo pero no han hecho movimientos para poder engatusarlo. El presidente del FC Barcelona, Joan Laporta, afirmó ayer que, «hoy por hoy», la entidad azulgrana está en condiciones económicas de poder abordar la contratación del internacional español Nico Williams.
«Podríamos hacer frente a un fichaje de este nivel», aseguró en declaraciones a Catalunya Ràdio Laporta, quien dijo que «evidentemente» el jugador del Athletic Club le gusta, «y mucho», aunque trasladó la responsabilidad de decidir sobre esta posible incorporación al director deportivo, Anderson Luis de Souza 'Deco', y al nuevo entrenador, Hansi Flick.
El máximo mandatario de la entidad azulgrana se felicitó de que «en breve», el Barça anunciará que ha cerrado «una serie de operaciones» que le permitirán «regresar a la normalidad del fair-play financiero» después de tres años. «Y eso te ayuda mucho, sobre todo para ir al mercado y hacer unas operaciones que son necesarias para reforzar el equipo», añadió Laporta sin especificar cuáles serán prioritarias durante el mercado estival.
De hecho, el propio presidente de LaLiga, Javier Tebas, declaró recientemente durante un congreso celebrado en México, que el Barcelona «está saliendo de su situación económica complicada» y que, de los últimos años, «este es el que más fácil lo tiene» para poder cumplir con el control financiero y poder fichar lo que quiere.
A pesar de todos los pretendientes que surgen día tras día, Williams sigue centrado en la Eurocopa. Por activa y por pasiva, ha aplazado su decisión tras la Eurocopa. Tendrá tiempo de deshojar la margarita, en la que no descarta su continuidad en el equipo de su vida: el Athletic Club de Bilbao.
Punto de vista
Viaje al pasado
España llegó a la Eurocopa con dudas. En los bares del país no se hablaba de la selección, ni mucho menos se charlaba sobre unas semifinales contra Francia. Qué curiosidad, como en 2008. Esta vez, un entrenador mucho más sosegado que Luis Aragonés y con una generación de futbolistas de un perfil más o menos bajo. Lejos de los focos que señalaban a Francia, Inglaterra o Portugal, los de Luis de la Fuente han ido creciendo y vistiéndose, sin miedo, con la camiseta de favorita. Los’ niños’ han desafiado a los mayores. Agarraron a a la anfitriona y le negaron la felicidad de avanzar de ronda. Desabrocharon el cinturón de seguridad de la vigente campeona de la Eurocopa y la dejó en la cuneta de camino a octavos. Todo parecido con 2008 es pura causalidad. Luis de la Fuente, a pesar de las dudas, ha conseguido crear el mismo espíritu que de forjó en Innsbrück, donde bajo el amparo del Tirol se creó una familia que tocó la gloria. A falta de dos citas para igualar la gesta, todo evoca a aquellos tiempos donde nadie confiaba en la selección y ésta se rebeló contra el régimen establecido. Superó la barrera de cuartos y venció a Alemania en una final mágica para todos. Que se repita en Berlín.