Otra jornada ha dejado un episodio violento en los campos de fútbol en Mallorca. En esta ocasión ha sido en un partido de infantiles entre el Urbanitzacions y la Penya Arrabal en el que una madre del conjunto visitante ha sido víctima de agresiones y amenazas por parte de aficionadas del equipo de Llucmajor una vez concluido el encuentro. La mujer agredida ha presentado una denuncia ante la Guardia Civil en la que cuenta con un parte médico de Son Llàtzer y se apoya en vídeos del incidente y múltiples testigos que corroborarán su versión de los hechos ante la Justicia.
La denunciante, madre de un jugador de la Penya Arrabal, asegura en su denuncia ante la Guardia Civil de Llucmajor que recibió varios puñetazos por el cuerpo de una aficionada del Urbanitzacions mientras otra la sujetaba por el pelo. Además, el escrito ante la Benemérita refleja insultos y amenazas como «a fuera te voy a esperar» o «te juro que te voy a matar» por parte de otros individuos mientras los presentes trataban de mediar a la espera de que las fuerzas de seguridad permitieran a los integrantes del conjunto palmesano abandonar las instalaciones con seguridad.
Los incidentes se produjeron una vez concluido el partido cuando la víctima se dirigió al cuerpo técnico local para tratar de identificar al jugador del Urbanitzacions que había agredido a su hijo cuando ambos equipos se daban la mano al terminar el partido con victoria de la Penya Arrabal por 1-3. En el momento que preguntaba dos personas empezaron a darle manotazos y, tras pedir que no la tocara, se precipitó la agresión con puñetazos y posteriores amenazas.
La víctima de la agresión relata que anteriormente, durante todo el partido, el mismo grupo de aficionados y aficionadas del Urbanitzacions estuvieron insultando tanto a los jugadores de la Penya Arrabal como al árbitro del partido, que tampoco actuó para tratar de contener las faltas de respeto. Los seguidores visitantes hicieron caso omiso para evitar males mayores y en varias ocasiones pidieron por favor que cesar en un comportamiento que se aleja de los valores del deporte y, especialmente, en un partido de niños de 12 años. La denunciante asegura que el comportamiento del público del equipo palmesano fue modélico y, en conversación telefónica con este periódico, ha querido agradecer todas las muestras de apoyo recibidas por parte de los familiares de los jugadores del equipo de Can Valero.
Se da la circunstancias que otros equipos como el Espanya o el San Pedro también han hecho llegar sus quejas por el ambiente sufrido en los encuentros en los que se han enfrentado con el Urbanitzacions.