Mario Mola se consagró entre la élite mundial en la otra punta del mundo. Y el triatleta olímpico mallorquín lo hizo ante uno de los mejores especialistas del planeta y evidenciando una progresión excepcional. El balear acabó segundo en el inicio de las Series Mundiales de Triatlón, que se abrieron en Auckland (Nueva Zelanda), y dejó claro que el trabajo en Estados Unidos a las órdenes de Joel Filliol ha dado sus frutos.
Sólo un enorme Javier Gómez Noya pudo superar a Mola, que días atrás oficializaba su fichaje por Spiuk, en una prueba en la que los dos representantes españoles coparon las primeras plazas, se repartieron el oro y la plata en Auckland y protagonizaron un duelo excitante a histórico en el segmento de carrera a pie, tras una gran remontada por parte de Mario.
Las cosas comenzaron bien para el mallorquín. Y es que Mola apenas cedía diecinueve segundos respecto al mejor en el agua, el eslovaco Richard Varga (17:34 por 17:53 de Mola), pero a la hora de montarse en la bicicleta, Mario logró engancharse con solvencia al grupo de cabeza, pese a que un pinchazo le hizo perder margen sobre los líderes. El isleño se repuso y se instaló en un pelotón que rodó a menos de un minuto de cabeza de carrera, trabajando para recortar terreno, cazando a Gómez Noya y sus compañeros.
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Las esperanzas de pisar podio de Mario Mola estaban intactas, pero fue en el segmento de carrera a pie, en los últimos 10 kilómetros, en los que Gómez y Mola se salieron. El malorquín resistió en su tramo preferido y en el que mejor de desenvuelve hasta que el gallego lanzó un ataque decisivo que rompió la carrera por el oro. Eso sí, ambos fueron los únicos que corrieron por debajo de la media hora (Mola a 29:50 por 29:36 de Gómez), llevándose el triunfo Gómez Noya (1:55:51), con apenas doce segundos sobre Mola (1:56:03). El portugués Joan Silva (1:56:22) completó el podio.
El próximo asalto, en San Diego, los días 19 y 20 de abril. Allí estarán los Brownlee, pero con Mola segundo en la general.