Cuando el culebrón de Marc Baró parecía llegar a su fin se ha escrito un nuevo episodio que eleva la tensión sobre el desenlace. El Atlético Baleares tiene previsto acudir a los tribunales para defender sus intereses tras la salida de un jugador con contrato en vigor con la entidad blanquiazul hasta el 30 de junio de 2024 y por el que reclamará el pago de la cláusula de rescisión que ronda los 80.000 euros.
Después del anuncio por parte del Real Murcia de la incorporación de Marc Baró realizado el domingo, el Atlético Baleares ha hecho público este lunes un comunicado en el que explica que «se ve obligado a emprender acciones legales debido al incumplimiento del contrato de Baró con nuestra entidad». «El club ha iniciado ya las acciones pertinentes para denunciar estos hechos, frente al Real Murcia y Marc Baró», concluye la información facilitad por la entidad balearica, que el viernes, mediante su director deportivo, Patrick Messow, expuso la situación de rebeldía del defensa mallorquín.
Marc Baró llegó al Atlético Baleares el pasado mercado de invierno y prolongó su contrato después de haber jugado 10 encuentros en los que participó 45 minutos. La extensión del compromiso se hizo oficial a principios de abril, pero el futbolista expresó en la pretemporada su deseo de salir del club. «Desde el ATB se trabajó su salida al CD Alcoyano pero ésta fue declinada por Baró. Poco después, surgió la posibilidad de traspaso al Real Murcia, pero el club no valoraba suficientemente al jugador, como para hacer frente a la totalidad de su cláusula», revela el comunicado del club que preside Ingo Volckmann, que remite al pago de la cláusula para formalizar la salida.
El Murcia comunicó su fichaje en la jornada del domingo y espera que Marc Baró se incorpore a los entrenamientos del equipo a lo largo de los próximos días a pesar de que en el Atlético Baleares tienen claro que tiene «contrato vigente» como balearico una vez que no se ha satisfecho el pago de la cantidad estipulada en el contrato para su traspaso.