El Atlético Baleares debe remontar este domingo el 2–0 de la ida que da ventaja al CD Mirandés en el partido de vuelta de la ronda final por el ascenso a la Liga 123. Los blanquiazules quieren volver a una categoría en la que no militan desde hace 58 años.
El Baleares, campeón del Grupo 3 de Segunda B, cayó ante el Racing de Santander en la eliminatoria directa: 0–0 en el Sardinero y 1–1 en Son Malferit. Después, dejó en el camino al Melilla (0–0 y 1–0) y afronta el encuentro de vuelta de la ronda final con la desventaja del 2–0 de la ida en el estadio de Anduva. El Mirandés, por su parte, tercero en la clasificación del Grupo 2, llega a la isla tras eliminar al Recreativo de Huelva.
La afición blanquiazul llenará el campo de Son Malferit, de hierba sintética y con capacidad para unos 2.000 espectadores, para animar a su equipo.
«Por convicción y devoción podemos remontar», ha declarado el entrenador del Baleares, Manix Mandiola.
Borja Jiménez, técnico del Mirandés, ha subrayado, asimismo, que su equipo intentará en Palma «ser fiel» a lo que ha sido todo el año con el objetivo de practicar un fútbol «valiente y agresivo».
El conjunto burgalés, precisamente, subió a Segunda A en 2012 tras derrotar al Baleares en una eliminatoria a doble partido.